La lejana “clase política”

¿Fue o es el 15 M un movimiento reivindicativo, Una plataforma política o sencillamente un grito desesperado hacia la clase política? En mi opinión tiene mucho de los tres componentes, muchas de sus reivindicaciones continúan latentes en sus asambleas, vínculos y redes sociales, algunos de sus miembros destacados dieron el salto a la política y desde luego para gran parte de sus seguidores es un medio para hacerse oír, tal vez por ello recibieron el calificativo de “indignados”

Hace unos días un amigo y yo coincidíamos en la opinión de que una persona que lleva demasiado tiempo ocupando un puesto político, es imposible que pueda estar al día de la realidad social, por que su día a día está entre moquetas, despachos, vehículos oficiales y demasiadas personas haciendo lo posible para hacerle su trabajo mas cómodo te hace imposible obtener una visión clara de la realidad, concretamente coincidíamos en mencionar a Manuel Chaves que ha estado desde que se iniciaron los procesos democráticos en España puestos de cierta o gran responsabilidad (diputado, ministro, Presidente de la JJ.AA, vicepresidencia del gobierno...) el ejemplo de Chaves, no es una excepción, haciendo un mínimo seguimiento de los cargos electos en cada una de las provincias, compruebas que hay
determinados nombres que son inamovibles en las listas electorales, esto es algo fácil de comprobar, en algunos casos, lo que se hace prácticamente imposible es conseguir pruebas de que algunos hacen su trabajo, no se les recuerda intervención o iniciativa alguna en favor de su provincia o del interés general. deben ser lo que el prestigioso y ya fallecido cronista parlamentario Don Luís Carandel describía como diputados “culi-parlantes” lo que equivale a que solo están para levantarse a votar (ya ni eso, les han puesto un botón delante del escaño)

La Junta de Andalucía ahora trata de imponer que los alcaldes no puedan también ser candidatos en las elecciones autonómicas y una de las escusas que esgrimen es entre otras, precisamente el fomentar la regeneración política, bueno, creo para ello lo primordial sería que los partidos, especialmente los mayoritarios, muestren un mínimo de voluntad en hacerlo.

Me dicen que los partidos grandes cuentan entre sus agrupaciones juveniles con personas lo sobradamente preparadas para protagonizar dicha regeneración, pero que sus iniciativas y propuestas son eclipsadas por otros, los que están mas pendientes de la sombra que mejor cobija u otros que tan solo tienen que hacer uso de su envenenada pluma y utilizarla contra los adversarios, para destacar.

En mi opinión el alejamiento de la denominada “clase política” y la ciudadanía es mas que evidente y el acercamiento hacia lo que se llama de forma generica “los mercados” se acentúa, por ello no es de extrañar movimientos como el de “los indignados” o “15M” o como se le quiera llamar, por mas que algunos quieran de manera despectiva denominarlos “perro-flautas” u otros tratar de utilizarlos en favor de sus intereses electoralistas.